Durante la conducción, se requiere mantener todos los sentidos bien alerta y estar atentos tanto a lo que pasa dentro como fuera del vehículo. Sin embargo, muchas veces este nivel de atención falla, existen puntos ciegos en el vehículo o imprudencia al volante. Esto es muy grave, sobre todo en empresas de transporte donde los conductores pasan extensas jornadas en el vehículo, recorriendo largas rutas monótonas.
Por eso, para evitar accidentes producidos por distracción o irresponsabilidad humana, surgen las tecnologías de asistencia en la conducción, siendo uno de los más populares en el rubro del transporte los sistemas ADAS. En este artículo te hacemos un resumen con todo lo que necesitas saber.
Los sistemas ADAS (Advanced Driver Assistance Systems) son una herramienta tecnológica que mejora la eficiencia y seguridad en la conducción, aprovechando mejor los recursos y evitando accidentes.
Estos sistemas avanzados en la asistencia en la conducción han demostrado ser muy efectivos para prevenir colisiones, incluso algunos estudios estiman que:
“Si todos los vehículos tuvieran instalados estos sistemas, se podrían prevenir el 40% de todos los siniestros de tráfico, el 37% de todas las lesiones de consideración y el 29% de todas las muertes relacionadas con los siniestros viales.
Además de la prevención de accidentes y mejorar la seguridad vial, los sistemas ADAS permiten lograr un uso más eficiente del recurso combustible, detectar fallas mecánicas y alargar la vida útil de los vehículos.
Por medio de cámaras y sensores, los sistemas ADAS logran que los vehículos “puedan ver” más allá de la capacidad del ojo humano, con el propósito de enviar avisos al conductor para mantenerlo alerta de lo que pasa alrededor.
Esta función tiene como primer objetivo el alertar al conductor cuando está cercano a un posible peligro (otro vehículo, un peatón, un objeto en la ruta, etc.) y por medio de una señal (sonora y/o parpadeante) indica que se debe reducir la velocidad del vehículo para mantener una distancia de seguridad. En el caso de que la velocidad no se reduzca se activa el frenado de emergencia.
Esta alerta funciona cuando un vehículo está yendo en marcha atrás y el conductor tiene poca visibilidad de lo que ocurre en la parte trasera. Es decir, si se cruza un vehículo más pequeño, una persona o un animal, los sensores inteligentes emiten una señal de alerta. Esto es muy útil, sobre todo para vehículos de gran dimensión, donde la visibilidad trasera se reduce considerablemente.
Si bien los espejos retrovisores de los vehículos se pueden ajustar para que el conductor pueda ver por los costados y hacia atrás, siempre existen “puntos ciegos” donde el conductor no tiene rango de visibilidad. Para evitar accidentes debido a esto, la detección de ángulo muerto funciona gracias a unos sensores ubicados en ambas partes lateral trasera, los que emiten señales en caso de proximidad peligrosa.
Ya sea por cansancio, calor, enfermedad o por conducir sin detenciones más de las horas establecidas, la detección de fatiga supervisa y analiza el comportamiento de los conductores, detectando cuando existe algo fuera de lo habitual. En el caso de que el sistema detecte algún comportamiento sospechoso de fatiga o somnolencia, enviará una alerta (sonora, visual y/o táctil) para captar la atención del conductor. De ser necesario se le indicará que detenga el vehículo y tome un descanso.
Esta función se activa cuando se detecta que el vehículo va a cambiar de carril de manera involuntaria, es decir, con sospecha de un posible accidente. El sistema analiza la velocidad, los movimientos del volante, la luz intermitente, y en base a todos estos parámetros, analiza si es un cambio de carril involuntario, generando una alerta para evitar un accidente.
Los accidentes y el uso inadecuado de recursos, son algunas de las principales causas de pérdidas económicas y quiebras en empresas de transporte. Los sistemas de asistencia en la conducción son un tipo de tecnología al servicio del transporte, ya que están diseñados no solo para ayudar al conductor y prevenir accidentes, sino también para mejorar la eficiencia en el uso de combustible y protección de activos.
Las empresas de transporte utilizan cada vez más estos sistemas ya que se han convertido en una inversión rentable para el sector, incluso las industrias de fabricación de vehículos las están equipando en sus nuevos modelos. Si quieres saber más sobre estos sistemas, descarga el ebook gratuito a continuación.
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